La dependencia de las cadenas de suministro de Asia ha llevado al sector a tener un problema grave a nivel mundial.
Este 2021, se ha visto golpeado por la escasez de componente electrónicos, y especialmente en chips de siliconas y cristales. Esta escasez prolongada, ha llevado a que importantes fábricas de automóviles tengan que depender sus altas producciones debido a la incapacidad de encontrar estos productos.
La industria de los componentes electrónicos siempre ha sido cíclica, pero esta vez China ha pasado de ser un lugar idóneo dónde reducir costes a ser una potencia extranjera que controla todas las partes de la cadena de suministro a nivel mundial. Europa con esta crisis, se hace la pregunta de si colectivamente se ha logrado o en el peor de los casos, ha sido un error estratégico que lleva arrastrando muchos años.
La pandemia por la que hemos pasado ha resaltado la fragilidad de las cadenas de suministro a nivel europeo, que dependen además de fábricas en la distancia. Desde ELATE S.A hemos conseguido ofrecer un servicio integral desde la fabricación hasta el montaje del circuito facilitando así mucho las labores de nuestros clientes. Si es verdad que en cuanto a componentes muchos de ellos tenemos que recurrir al país asiático, ya que desde Europa prácticamente se han abandonado en gran medida los componentes, dejando exclusivamente sectores como el militar y el aeroespacial.
Existe a su vez una enorme complejidad y dependencia de las cadenas de suministro, ya que muchas de las compañías europeas abren filiales en Asia o subcontrata empresas en esos lugares, y esto es una de las razones más importantes por las que ese territorio domina el sector. Es aquí donde se ha visto la fragilidad del mercado y entra en juego la discusión de si de verdad Europa debe reinventarse y cambiar el modelo que se ha estado trabajando hasta ahora.